Las nueve sugerencias

Un interludio que marca la réplica de Flaubert

Foto: Durante un enjambre. Las abejas obreras en la entrada de la colmena levantan el abdomen y abanican las alas para dispersar el aire a través de las glándulas Nasonov, emitiendo una feromona que anuncia la ubicación de la entrada de la colmena al enjambre con fines de orientación. Un ejemplo más de las cosas extrañas y maravillosas que hacen las moléculas cuando se las deja a su suerte.

Mi hijo Adriaan atrapó con éxito a mano a la reina de este enjambre el 4 de mayo y actualmente es la gobernante de una nueva colmena en la propiedad.

Interrumpimos la Réplica Flaubert (que, lamentablemente, parece destinada a múltiples interrupciones) con un mensaje de servicio público.

Rara vez escribo sobre en qué consiste el intercambio en grupo, pero hay ocasiones en las que siento que es necesario publicar una introducción a la práctica, por así decirlo, porque el arte y el oficio de hablar en grupo se ha vuelto, en mi opinión, suave y laxo. ; y la generación de miembros senior y líderes de grupo que estaban dispuestos a empuñar el palo (como lo hacen en el Zen, donde literalmente recibes un golpe si no prestas atención) ya no existe.

Confieso que hay muchas ocasiones en las que desearía tener un palo en las reuniones y poder golpear a la gente con él; pero, por supuesto, eso es pura fantasía porque no soy un tipo de persona que literalmente golpea con palos.

Al mismo tiempo, ¿en qué diablos está pensando la gente? Al parecer, no mucho; y las reuniones de zoom, por benditas que sean como todas las demás cosas de la creación, han agravado el problema. Ahora pensamos que las reuniones de Gurdjieff son alguna forma de televisión.

Supongo que tenía que suceder, pero ¡ay! Ahora ni siquiera hay agua hirviendo en la estufa cuando el pollo corre por la cocina.

Ejem. Ni siquiera hay una olla para ponerlo.

La gente en las reuniones piensa (como supongo que siempre lo hemos hecho, y es una vergüenza para todos) que pueden soltar casi cualquier tontería que quieran, según los caprichos de su ego y basándose en los impulsos aleatorios de deseos simplistas, no examinados y a menudo infantiles. .

Bueno, por supuesto, así somos todos de todos modos; Entonces, ¿por qué esperar que sea diferente en los grupos? Después de todo, venimos tal como somos; y somos pequeñas criaturas débiles. Si fuéramos fuertes no necesitaríamos el trabajo; pero lo hacemos, de lo contrario no lo buscaríamos ni estaríamos en él.

Consideremos este ensayo, entonces, como un palo metafísico con el que golpearnos a todos al mismo tiempo. Yo incluido. Como canté hace unas semanas: “¿Qué me pasa? Deberían darme una paliza en la cabeza.

Comenzaré diciendo que, por supuesto, debes venir a un grupo exactamente como eres y que puedes decir lo que quieras. He escuchado las cosas más absurdas durante el transcurso de mis muchas décadas en grupos, incluidas, literalmente, desvaríos racistas de irlandeses borrachos. He escuchado estos comentarios hechos (más de una vez, jadeo) dentro de los muros sagrados de la propia Fundación Gurdjieff, por desconcertante que pueda parecer.

Ah bueno. Las diatribas locas pueden ser buenas para el trabajo interior, a veces.

Entonces, ¿cómo intercambiar? Aquí hay nueve sugerencias.